En la vida, es común experimentar momentos en los que nos sentimos fuera de lugar. Ya sea en el trabajo, en un nuevo entorno, en una relación o en un grupo de amigos, todos hemos levantado la mano en algún momento y nos hemos preguntado: «¿Qué estoy haciendo aquí?». Es una sensación universal y más habitual de lo que se cree. Aunque puede ser incómodo, es importante saber cómo afrontarlo para encontrar nuestro lugar y sentirnos en sintonía con nuestro entorno. Exploraremos las causas de este sentimiento y cómo manejarlo de manera efectiva.
Los factores que contribuyen a sentirse fuera de lugar
Según la psicóloga experta en educación emocional Anna Romeu, existen dos variables principales que hacen que nos sintamos fuera de lugar.
- La primera es el factor ambiental o de entorno, que a menudo no está bajo nuestro control. En algunos casos, nos encontramos con grupos, ya sean amigos, compañeros de trabajo o estudios, que son muy cerrados y en los que cuesta mucho entrar. También puede ocurrir en situaciones en las que no queremos estar, como un trabajo que no nos gusta o una relación en la que no nos sentimos cómodos.
- El segundo factor es personal, relacionado con nuestra propia manera de ser. Romeu explica que las personas que tienen pocas habilidades sociales o que necesitan tener mucho control sobre las situaciones tienden a sentirse más fuera de lugar. Sin embargo, es importante destacar que muchas veces somos nosotros mismos quienes provocamos esta sensación. Por ejemplo, en los primeros años de universidad, es común que algunas personas se den cuenta de que no están estudiando la carrera que les gusta y con la que se sienten identificadas. Si después de un tiempo seguimos sintiendo que no encajamos, puede ser necesario considerar nuevas alternativas.
El origen de esta sensación y cómo afrontarla
Encontrar nuestro lugar en un nuevo entorno no siempre es fácil, es un proceso normal de adaptación. Cuando comenzamos un nuevo trabajo o cambiamos de lugar de residencia, es comprensible que necesitemos tiempo para adaptarnos y encontrar nuestro espacio. Cualquier transición o cambio de contexto requiere un ajuste en nuestro comportamiento, roles y conocimientos. Es importante tener paciencia y recordar que esta sensación de estar fuera de lugar puede ser temporal.
Si la sensación persiste y afecta nuestra vida diaria, es recomendable buscar ayuda profesional. La terapia de comunicación, también conocida como psicoterapia, es el principal tratamiento para el trastorno de despersonalización-desrealización.
Los efectos emocionales de sentirse fuera de lugar
Sentirse fuera de lugar puede tener un impacto emocional significativo. Puede generar ansiedad, ira, tristeza, desconcierto e incertidumbre. Algunas personas pueden obsesionarse con encajar en determinados grupos o situaciones, lo cual no siempre es necesario. Si esta sensación se convierte en algo permanente, puede llevar al aislamiento social y tener un impacto negativo en nuestra salud mental. Las relaciones sociales son importantes para nuestro bienestar, y la falta de contacto humano puede contribuir a la depresión.
Claves y errores al enfrentar la sensación de estar fuera de lugar
Cuando nos sentimos fuera de lugar, es importante tener en cuenta algunas claves para afrontar esta situación de manera efectiva.
- Evitar huir demasiado pronto puede disminuir nuestra autoeficacia y hacer que en futuras situaciones optemos por la huida como única alternativa.
- Es necesario darle tiempo al tiempo para adaptarnos a nuevas situaciones y contextos. Si somos tímidos o tímidas, es importante adaptar nuestra vida a nuestra manera de ser y no luchar contra nosotros mismos.
- Apoyarse en técnicas de prevención, como la meditación o el mindfulness, puede ser beneficioso para regular las señales de malestar.
Es importante evitar algunos comportamientos como disimular que nos sentimos bien, ya que esto solo empeorará la situación. Tampoco debemos quedarnos estancados en un lugar o proyecto que no nos satisface. Si no nos sentimos cómodos, es importante valorar nuevas alternativas. No debemos descuidar otras áreas de nuestra vida por el afán de encajar en un determinado entorno.
«La clave es mantener un equilibrio entre nuestra vida social y nuestras relaciones personales».
El trastorno de despersonalización-desrealización: causas y tratamiento
El trastorno de despersonalización-desrealización es una condición en la que se experimentan persistentemente sensaciones de estar observándose a uno mismo desde afuera del propio cuerpo, o sentir que las cosas que nos rodean no son reales. Estas sensaciones pueden ser perturbadoras y llevarnos a sentirnos como si estuviéramos en un sueño. Aunque es común tener experiencias pasajeras de despersonalización o desrealización, cuando estas sensaciones persisten y afectan nuestra capacidad de funcionar en la vida diaria, se considera un trastorno.
La causa exacta del trastorno de despersonalización-desrealización no se comprende completamente, pero se cree que factores genéticos y ambientales pueden contribuir a su desarrollo. Además, situaciones de estrés intenso o traumas pueden desencadenar episodios. Estos síntomas pueden generar angustia y dificultades para concentrarse y recordar información. Además, pueden interferir con nuestras relaciones personales, el trabajo y otras actividades diarias. El tratamiento principal para este trastorno es la terapia de comunicación, aunque en algunos casos pueden utilizarse otro tipo de tratamientos más prescriptivos.
Conclusiones
Sentirse fuera de lugar es más natural de lo que parece y es algo que todos experimentamos en algún momento de nuestras vidas. Es importante reconocer y afrontar esta sensación de manera efectiva para encontrar nuestro lugar y sentirnos en sintonía con nuestro entorno. Ya sea a través de la adaptación, la búsqueda de nuevas alternativas o el apoyo profesional, podemos superar este sentimiento y encontrar nuestro espacio en el mundo. Recuerda que no estás solo/a y que la clave está en aprender a aceptarte a ti mism@ y encontrar la autenticidad en cada experiencia que vivas.
Dale la vuelta a la situación, y aprovecha esta oportunidad para crecer, aprender y descubrir nuevas facetas de ti mism@.
